
Sean todas las personas bienaventuradas en este lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme. Vengan a conocer aquesta venta.
¿Acaso vuestra merced no sabe lo que es una venta?
Pues ha de saber, que en aquestas tierras de Castilla, como muchas en derredor, fueron en un tiempo tierra de ventas, de lugares de encuentro para viajantes, tratantes, trashumantes o simplemente las buenas gentes que buscaban descanso o calor en su viaje. Por alguna similar anduvo el más famoso y gentil caballero que en la tierra ha habitado: Alonso Quijano, conocido en todos los reinos y lugares como Don Quijote de la Mancha.
De las ventas surgieron los pueblos; de lugares que servían de encuentro, de negocio, de intercambio de conocimiento, de coloquios, de amistad. En definitiva, lugares de lo común.
Pero aquesta venta no es una venta cualquiera. Es la venta del Trabajo Social y prestas a encontrarse tras largos tiempos de tribulaciones, cientos de trabajadoras sociales llegan ya desde todos los lugares del gran mundo, con dicha y alegría para compartir y construir el que llaman su XIV Congreso Estatal y II Iberoamericano de Trabajo Social. ¡Vive dios que no ha visto ni verá nada similar en este mundo de lo social!
En estos lares se encontrarán no sólo las trabajadoras sociales sino otras profesionales como psicólogas, educadoras sociales, pedagogas, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas, etc, cuyo oficio no es otro que desfacer entuertos y ayudar a los desvalidos. Buenas gentes para las que no hay más límite que el cielo.
En mayo de 2022 en esta venta velarán sus armas durante tres y días con sus noches, como antiguamente hacían los caballeros andantes, encomendándose a la ética, la justicia social y otros buenos fines que sin duda farán de este mundo un lugar mejor.
Entre ella estará Dulcinea, que tras la muerte del Quijote se fizo trabajadora social y desde entonces cabalga con Sancho en mil duelos y quebrantos, acudiendo presurosa a ayudar a las humildes gentes que necesitan su ayuda. Venga y descubra sus aventuras en su desempeño profesional, que la diligencia es la madre de la buena ventura.
Y lo más importante, que casi se me olvida —mi memoria es tan mala, que a veces olvido mi propio nombre—. La venta es el lugar de la ayuda entre profesionales, la supervisión de casos dicen, que se asemeja al pañuelo y al hombro donde llorar o buscar comunes apoyos.
¡No confunda ventas con castillos! Que si no forma parte de aquesta venta será desdichado. Puesto que en aqueste lugar, la utopía se vuelve realidad.
Y como el Hidalgo, esperemos que al alba, cuando partamos hacia nuestras tierras, seamos todas ya de la caballería del bello oficio del Trabajo Social renovadas por dentro y prestas para luchar contra las gigantes desigualdades del mundo, que parece que nadie ve.
«¡Cambiar el mundo, que no es locura ni utopía, sino justicia!»
Vale.


